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El lenguaje universal de la Música

El lenguaje universal de la Música

Tal y como las letras, palabras, acentos, gramática y vocabulario del idioma hablado y escrito, el lenguaje de la música es el medio de comunicación universal, de interpretación con instrumentos musicales o de la voz. Escalera de sol, de fa, blancas, negras, corcheas, semicorcheas, fusas y semifusas. Figuras dibujadas sobre horizontales a rayas de un pentagrama combinan la altura de los sonidos y los silencios con su duración, respetando los principios de la melodía, de la armonía, de la métrica, de la tonalidad, del contrapunto y del ritmo. Como resultado de esa combinación que se transmite al pasado, se acompaña al presente o nos permite reducirlo al futuro. Lo escuchamos en directo en un concierto, una ópera, en un auditorio, en un teatro con envoltura de la danza, una iglesia, una bodega, una cava, en el jardín, junto al despacho, en la calle, en el tren, en un avión, en un tren, en un barco, en un sillón, tumbados en la cama de casa, de un hotel, de un hospital. Durante el trabajo, viajamos, comemos, bebemos o leemos. En cualquier caso, la música se acompaña y nos relaja o anima a bailarla y es emocional. Custodia en particiones, como libros que guardan palabras escritas, composiciones originales y únicas inmortalizaciones. Estudio y trabajo de creación e interpretación por queja a los más exigentes.

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La Navidad nos acerca a la música en directo, obras tradicionales de nuestra tierra y antepasados y hace que su memoria perdura. Celebramos las fiestas y entrada del año con música de todas partes, interpretada por instrumentos de cuerda, viento, percusión, madera, metal, práctica. Música que acompaña canciones cantadas por voces infantiles y adultas, con registros agudos y graves, de solistas sopranos y tenores, de contraltos y bajos, para encontrar el término medio en las mezzosopranos y los barítonos, según sean voces femeninas o masculinas. A corales y con solistas, cuando se acerca el fin del año, podemos escuchar conciertos fantásticos que sacan a la luz obras navideñas y patrióticas, alegres y melancólicas, que no existen de muy diversas opiniones y tendencias y que les hacen sentir que, sobre todo, algunos humanos perduren en la memoria. ¡Admirada música!

Que en 2020 permite tomar caminos inexplorados y maravillosos para llegar a queramos, con quien queramos a amar el entorno de la naturaleza, la fuente de inspiración tanta música, que tarde temprano dejaremos.